Nuestra Historia

PALMAS DEL CESAR S.A. nació como una empresa en el año 1960, su creación fue producto del sentido visionario de empresarios santandereanos que creyeron en la palma africana como un cultivo promisorio con capacidad de generar progreso y desarrollo en la región.

Conocida anteriormente como Hipinlandia, la plantación comenzó con 500 hectáreas, fue a su vez, una de las primeras siembras comerciales de palma africana en el país, por lo cual la empresa es pionera en esta importante actividad agrícola.

El apoyo de entidades gubernamentales sumado al empuje y tesón de sus fundadores, permitieron vencer las enormes limitaciones tecnológicas y de infraestructura existentes en esa época.

Hacia mediados de la década del 70, comenzó una nueva etapa en la empresa, que la llevó a triplicar sus siembras hasta 1.500 hectáreas, mejorar sus instalaciones y reorganizarse administrativamente.

Palmas del Cesar es una sociedad anónima, en la cual la Junta Directiva traza las directrices que rigen los destinos de la empresa interpretando el mandato de sus accionistas.

Esta organización ha creado las condiciones para adaptarse a los cambios y a los nuevos desarrollos gracias a una filosofía administrativa adecuada a las exigencias que se imponen en el moderno mundo empresarial. Directivos, asesores, ingenieros, tecnólogos en diferentes especialidades, personal calificado y trabajadores de campo, planta extractora y servicios generales conforman una gran familia que día a día enfrenta el desafío de un mejor mañana, sembrando el presente con su fuerza laboral y compromiso indeclinable de cumplir cabalmente con las responsabilidades.

Desarrollamos una palmicultura responsable y sostenible buscando siempre la excelencia con el fin de producir los mejores frutos para el progreso.

Seremos el mejor referente dentro de la actividad palmera nacional y nos reconocerán por la forma responsable en que hemos hecho de la palma una fuente de progreso y desarrollo regional.